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(*incluido el IVA legal para España)
Nuestros lavabos empotrados: elegancia y claridad para el baño
Te ofrecemos variedad: nuestros lavabos empotrados son redondos y rectangulares, y están disponibles en numerosos tamaños y colores. Con qué puedes contar: todos los lavabos son de acero al titanio vitrificado.
¿Qué es lo que caracteriza a los lavabos empotrados?
A diferencia de los lavabos sobre encimera, un lavabo empotrado se integra en un elemento de soporte o en un mueble bastidor. El fondo de la cubeta se encuentra en la subestructura; desde el exterior, solo se ven la grifería y la parte interior de la cubeta. Esto genera superficies mayoritariamente cerradas en tu lavabo, así como un aspecto limpio y ordenado en el cuarto de baño. Cuando optas por una opción de instalación, puedes elegir un lavabo empotrado con perforación para grifo, aunque la grifería se fija directamente en el reborde de la cubeta. O también una solución sin perforación. Esta variante es posible al combinarla con una grifería mural.
El mejor entorno: la placa de soporte para tu lavabo empotrado
Como soporte para tu lavabo empotrado, te recomendamos una robusta placa de un material fácil de limpiar y permanentemente higiénico. Diversas maderas como el roble o el fresno son aptas para ello. También puedes optar por piedras naturales, como el granito o el mármol. El vidrio, el plástico o los azulejos también son opciones elegantes.
La pequeña gran diferencia: nuestro borde perfilado de 8 mm.
¿Qué nos distingue? La precisión y la perfección. Nuestros lavabos empotrados BetteLux y BetteLoft tienen un borde perfilado de tan solo 8 milímetros. Gracias a sus cantos exteriores filigrana los lavabos se integran de forma estéticamente fluida en su entorno, lo que da lugar a un diseño absolutamente armonioso.